Arreglos: Rayko León
Solista: Lucrecia
Casera, traigo mis flores
acabaditas de cortar,
las hay de todos colores,
mis flores para tu altar.
El girasol como lleva para tú Ochún,
y la rosa nacarada de Obatalá,
príncipe de pura sangre para Changó,
las Siete Potencias y Yemayá
y para Babalú Ayé, gladiolos blancos.
Traigo mis flores para tu altar
Flores, pero flores, flores, muchas flores,
llegan Los Gofiones y Lucrecia
regando flores, mamá.
Santa Bárbara bendita
Celina le cantaba
a Changó, a su papá.
Agua pa' Yemayá,
girasoles para Ochún, La Caridad.
Pero que miren lo que traigo,
te digo lo que traigo,
te traigo flores,
óyeme, flores y mi cantar.
Porque las flores son reconocimiento,
escucha bien,
ay, para toda deidad.
Príncipe de pura sangre,
girasoles, paraíso y mil colores.
To' lo bueno pa' ofrendar.
 |
| Foto: Mireya Reyes Fanjul, biógrafa de Celina. |
La Regla de Ocha-Ifá o Lukumi, despectivamente denominada “santería” por los conquistadores, herencia de la cultura yoruba, entró en Latinoamérica y principalmente en Cuba procedente de Nigeria, de la mano de los esclavos negros. Al prohibírseles su práctica, estos identificaron los santos cristianos con sus propios dioses y pudieron seguir practicando su religión. Así, Ochún hace referencia a la Virgen de la Caridad del Cobre. Obatalá a la Virgen de las Mercedes. Changó a Santa Bárbara. Yemayá a la Virgen de la Regla. Babalú Ayé a San Lázaro. Ochosí a San Norberto. Las Siete Potencias es el grupo formado por Obatalá, Elegguá, Changó, Oggún, Orunlá, Yemayá y Ochún.
En la actualidad sigue vigente esta concepción religiosa y no es nada extraño que exista una abundante cantidad de canciones que hacen referencia a la misma. Esta que hizo mundialmente popular la no menos famosa Reina de la música campesina, Celina González, fallecida en Febrero de 2015, es uno de los ejemplos más conocido. En 1996, Los Gofiones tuvimos el privilegio de grabar con la también llamada Reina del Guateque, dos canciones de nuestro CD Cuba: Yo soy el punto cubano, de la que son autores ella y su esposo Reutilio Domínguez, y Lágrimas negras, de Miguel Matamoros.
